Los profesionales del acuario aseguran el control de la calidad del agua, el abastecimiento y el mantenimiento y la atención diaria de cuidadores y veterinarios a todas las especies
Ante la situación extraordinaria de cuarentena y del cierre del acuario al público, el Oceanográfic ha asegurado los medios personales y materiales necesarios para que los animales que viven en los distintos hábitats continúen gozando de los más altos estándares de salud y bienestar que acreditan asociaciones tan prestigiosas mundialmente como la AZA. Igualmente ha tomado todas las medidas oportunas para minimizar el riesgo de contagio entre sus empleados y asegurar la labor asistencial.
El Oceanogràfic en este momento tiene unos 15.000 ejemplares de más de 500 especies de animales y para ellos mantendrán los mismos niveles de bienestar animal, que se basan en la alimentación, el entrenamiento, el juego, la estructura social, la salud y el entorno.
Por tanto todo el personal al cargo de los animales (cuidadores, acuaristas, entrenadores, veterinarios, técnicos de laboratorio, etc.) seguirá realizando sus labores habituales incluyendo no solo la alimentación sino también garantizando la calidad ambiental de las instalaciones, el ejercicio y la salud.
El personal de biología se ha repartido en diferentes equipos para atender a todas las áreas y ni interaccionan entre si ni se cruzan durante la operativa diaria. Asimismo, todas las unidades se han desdoblado en dos turnos de trabajo cada 4 días de forma que no se solapan ni coinciden nunca, desinfectan su entorno a la entrada y salida del trabajo y se transmiten las incidencias, indicaciones, etc, por vía telemática. Un equipo de limpieza profesional especializada descontamina las áreas comunes entre cada cambio de turno.
El Oceanogràfic, al igual que otras entidades veterinarias, ha puesto a disposición de las autoridades sanitarias entre otros enseres, su máquina de anestesia con ventilador mecánico para respiración asistida que de hecho está concebida para su uso hospitalario. Esta y otras máquinas, aunque forman parte del equipamiento del hospital veterinario del Oceanogràfic están homologadas para su uso en personas.
Gestionar 42 millones de litros de agua
Por otra parte, y no menos importante, se garantiza el buen estado y salubridad de todas las instalaciones del centro, principalmente el agua. El Oceanogràfic, que forma parte de la Ciutat de les Arts i les Ciències, gestiona 42 millones de litros de agua repartidos en muy diferentes espacios, incluyendo su Lago Vivo. Los técnicos seguirán atendiendo las instalaciones del filtrado de agua y todo el equipo energético para hacer que los tanques y áreas conserven su temperatura y parámetros habituales, que varían según el hábitat.
Básicamente se seguirán analizando todos los acuarios estableciéndose servicios mínimos para cumplir con los análisis requeridos todos los días de lunes a domingo. En concreto el laboratorio va a continuar analizando todos los parámetros fisicoquímicos y microbiológicos del agua, del aire y, también, del pescado con el que se alimentan los animales.
El Oceanogràfic también ha previsto mantener un stock de alimento congelado en sus instalaciones de Valencia que le permitirá garantizar la alimentación de todos los animales del centro hasta el mes de junio incluido.
Y, finalmente, toda la flora que incluye muy diversas especies botánicas repartidas en las ocho hectáreas de extensión con especies únicas y una abundancia de ejemplares que se ve en pocos parques grandes tampoco se verá abandonada en este periodo. La rica foresta del Oceanogràfic está compuesta por 375 especies entre árboles, arbustos, perennes, etc., con unas 28 clases distintas de palmeras y 50 de árboles en general.
Su cuidado se ha organizado con un equipo reducido que atiende los tratamientos, riego y labores de la época.
