• El acuario valenciano se convierte en la única institución europea con tres ejemplares de pez sierra de dos especies diferentes

     

    • El traslado de Remy estuvo coordinado por más de una treintena de profesionales de cinco organizaciones diferentes

     

    • El pez sierra es un animal en peligro crítico de extinción según la Lista Roja de la UICN y su presencia en centros controlados puede ayudar a preservar la especie

    El Oceanogràfic de Valencia anuncia la incorporación de un nuevo pez sierra (Pristis pristis) de más de tres metros y 103 kilos a sus instalaciones, marcando un nuevo hito en los esfuerzos de conservación de esta especie catalogada en peligro crítico de extinción según la Lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Internacional por la Conservación de la Naturaleza (UICN).

    El animal, que responde al nombre de Remy, llegó hace varios meses desde Planet Ocean, el acuario de Montpelier en Francia, en un complejo proceso que involucró la colaboración de cinco instituciones europeas y el esfuerzo coordinado de más de una treintena de profesionales.

    El traslado de Remy desde el centro de origen hasta el Oceanogràfic implicó minuciosos cuidados para trasladar a un animal de tal envergadura en un viaje de más de ocho horas de duración.

    El tanque seleccionado para llevar a cabo su traslado tenía un volumen de 15.000 litros de agua para garantizar las óptimas condiciones de transporte del animal. A pesar de ello, durante todo el trayecto se realizaron varias paradas de control para confirmar que el animal se encontraba en perfectas condiciones.

    Experiencia del equipo del Oceanogràfic en traslados de grandes animales

    El equipo del Oceanogràfic cuenta con amplia experiencia en el transporte de grandes animales, como el rescate de las dos belugas, Plombir y Miranda, del acuario NEMO de Járkov, o del último pez sierra realizada en 2019 desde Gothenburg (Suecia).

    Garantizando el bienestar de la especie

    Durante meses se planificó minuciosamente la operativa para minimizar el estrés de Remy en todo momento. Para ello, se implementaron medidas y materiales específicos que garantizaran su bienestar, como el uso de una protección especial para su sierra o camillas diseñadas específicamente para este transporte.

    El traslado se llevó a cabo con la ayuda de DeJong Marine Life, empresa con amplia experiencia en el transporte de animales acuáticos.

    Una vez en el Oceanogràfic, Remy fue recibido de acuerdo con un detallado procedimiento que garantizara una cuidadosa aclimatación a su nuevo entorno. El equipo de acuaristas, biólogos y veterinarios del acuario de Valencia, monitorizaron al animal durante todo el proceso de introducción al tanque de Océanos.

    Su adaptación fue todo un éxito y durante las primeras 24 horas se implementaron medidas de vigilancia adicionales para garantizar su bienestar y su correcta adaptación tanto a su nuevo entorno, como a sus nuevos compañeros.

     

    Posibilidad de reproducirse en el Oceanogràfic

    Con la llegada de Remy, ya son tres los peces sierra que habitan en el Oceanogràfic, convirtiéndose en la única institución zoológica de toda Europa que cuenta con tres ejemplares de peces sierra de dos especies diferentes.

    A diferencia del macho más veterano, “Mr. Jasson” (Pristis zijsron), Remy y Carla -la hembra que llegó en 2019- pertenecen a la misma especie (Pristis pristis), abriendo la posibilidad de poder establecer una relación reproductora a futuro.

    Remy, al igual que los otros peces sierra, es un animal de hábitos preferentemente nocturnos. Durante el día, suele permanecer posado en el fondo, aunque siempre están alerta ante cualquier posible movimiento que se produzca cerca de ellos.

    En su medio natural, esta especie utiliza su sierra para detectar y cazar sus presas. El proceso de alimentación de Remy es similar al de los demás ejemplares alojados en el Oceanogràfic. Para ello, se utiliza un largo tubo hasta el fondo del tanque, fijando en su extremo el alimento. Aunque el procedimiento es el mismo para los tres ejemplares, cada uno tiene su zona de alimentación, de manera que el equipo de Océanos ha ido adaptando las operaciones a las necesidades de cada uno.

    Debido a su tamaño y a la posibilidad de alcanzar grandes dimensiones (algunas especies hasta los siete metros de longitud), el alimento siempre se administra desde fuera del agua, evitando así cualquier tipo de relación con los buzos a la hora de la alimentar.

    Un compromiso europeo con la conservación

    La llegada de Remy se enmarca en un proyecto conjunto iniciado en 2022, cuando Oceanopolis (Brest), Planet Ocean (Montpellier) y el Oceanogràfic de la Ciutat de les Arts i les Ciències de Valencia se unieron para trabajar y mejorar la conservación de esta especie en todo el continente.

    Este logro se ha podido llevar a cabo gracias la continua labor y compromiso del Oceanogràfic en la conservación y bienestar de las especies marinas, y por supuesto, al esfuerzo de las instituciones europeas, que cada vez destinan más recursos a proyectos de conservación del medio marino para intentar garantizar un futuro más sostenible para aquellas especies que se encuentran en peligro crítico de desaparecer.