El objetivo de la expedición científica es estudiar la reproducción de las tortugas Caretta caretta y encontrar respuesta al comportamiento inusual detectado en algunas tortugas en la costa mediterránea
El equipo científico realizó estudios ecográficos y toma de muestras en 50 tortugas para comprender mejor los eventos de anidación
El Proyecto Tartaruga Boa Vista, formado por las fundaciones, Cabo Verde Natura 2000, BIOS Cabo Verde, Fundação Tartaruga y el Ministerio de Agricultura y Ambiente está financiado por la Fundación MAVA y el Gobierno de Cabo Verde
Una de las principales razones de ser del Oceanogràfic y su Fundación es la de estudiar cómo afectan los cambios del ecosistema a diversas especies marinas como belugas, delfines, tiburones, medusas o tortugas.
Son estos últimos animales -las tortugas marinas-, verdaderos supervivientes de los océanos, los que deben sortear multitud de adversidades durante su larga vida, como depredadores, capturas accidentales por embarcaciones pesqueras o toneladas de plástico que acaban en los mares debido a la acción humana.
La tortuga boba (Caretta caretta) es una de las siete especies de tortugas marinas que existen actualmente y la más común que habita en aguas españolas. Aunque su población se distribuye por todo el planeta, con importantes zonas de anidación en los océanos Atlántico e Índico, en el Mediterráneo anida, principalmente en la parte más oriental, en países como Turquía, Chipre o Grecia.
Al igual que lo observado en otras áreas de anidación, estas zonas habituales de puesta sufren cada vez temperaturas más altas debido al calentamiento global, lo que disminuye la idoneidad de estas zonas para la puesta, tanto por la supervivencia de los huevos, como por la producción de machos y hembras. En algunos reptiles, como las tortugas marinas, el sexo de los nuevos individuos depende de la temperatura de incubación, de tal manera que a temperaturas más altas nace un mayor porcentaje de hembras, mientras que, a temperaturas bajas, nacen machos.
En un contexto de cambio climático, se ha observado un proceso de feminización en las principales zonas de cría durante los últimos años, con lo que la supervivencia a largo plazo de la especie podría estar comprometida.
Las tortugas están cambiando su zona de anidación
Desde hace algunos años, las costas del Mediterráneo occidental, como las de España, Francia o Italia, llevan registrando una mayor presencia de puestas de huevos de tortuga boba, por lo que una de las hipótesis de trabajo es el de la colonización de esta área por la especie como una posible respuesta al cambio climático.
Una línea de investigación crucial para entender el fenómeno de colonización y la conservación de estos animales es la fisiología reproductora. Entender cómo, cuándo y porqué se reproducen permite analizar mejor el contexto poblacional y trabajar en consecuencia para preservarlas.
Por esta razón, la Fundación Oceanogràfic se trasladó al archipiélago africano de Cabo Verde de la mano del Proyecto Tartaruga de Boa Vista, para el estudio de las tortugas marinas durante la temporada de nidificación, al ser una de las zonas más importante de anidación de la especie en el mundo.
Ecografías a 50 tortugas reproductoras
La labor principal consistió en realizar ecografías a las tortugas marinas que salían a anidar y aplicar técnicas in situ que rara vez se pueden ejecutar en las playas españolas y nunca en números tan elevados.
El estudio se llevó a cabo en 50 tortugas de toda la isla gracias a labor conservacionista de las ONGs que trabajan en el archipiélago -Cabo Verde Natura 2000, Bios Cabo Verde y Fundação Tartaruga-, integrantes del Proyecto Tartaruga Boa Vista junto a las autoridades locales.
Adicionalmente, se pudo evaluar también el estado general de las tortugas y las concentraciones de hormonas reproductoras, lo que proporciona información más completa de su estado reproductor.
En tres de las tortugas evaluadas se instalaron dispositivos satélites para rastrear su recorrido y uso de hábitat, lo que aporta datos inestimables con los que se incrementa el conocimiento de la especie y la posibilidad de poder protegerlas.
Tortugas que no consiguen anidar
El estudio ecográfico se ejecutó tanto en tortugas que anidaron en la playa como en ejemplares que salieron a la arena y no consiguieron finalizar la operación.
Este comportamiento, a priori normal en el periodo de anidación cuando las hembras deben encontrar la zona adecuada para asegurar la correcta incubación, fue lo que sorprendió al equipo de rescate de la Fundación Oceanogràfic en una playa de València, cuando tras, aparentemente, desestimar la tortuga el intento de puesta, no se detectaron huevos en su interior mediante el estudio ecográfico.
El coste energético y la exposición a depredadores que supone para una tortuga marina salir del agua, dificulta comprender el porqué de este comportamiento.
Tras varias semanas se llevó a cabo el mismo hallazgo en una segunda tortuga, esta vez en Orihuela, lo que invita a pensar que este comportamiento esté relacionado con el fenómeno de colonización y permita comprenderlo mejor. Otra de las hipótesis planteadas es que sea un fenómeno habitual pero no reportado con anterioridad en la biología reproductora de estos maravillosos animales.
Con estos datos, la Fundación Oceanogràfic y las asociaciones locales de Cabo Verde -que coordinan los estudios científicos- pudieron estudiar si las tortugas marinas que anidan en el archipiélago muestran un comportamiento similar a las que se registraron en las costas valencianas.
Primeros resultados del estudio
Los primeros resultados del proyecto en Cabo Verde apuntan a que el fenómeno pueda darse también en playas de puesta asentadas y forma parte de la biología reproductora de la especie. Si bien es cierto que el estudio aún comprende la toma de datos en un mayor número de individuos para poder interpretar adecuadamente los resultados.
Con esta expedición, la Fundación Oceanogràfic se une a la red de instituciones internacionales que trabajan con las ONG y asociaciones locales de Cabo Verde que trabajan junto a voluntarios para generar ciencia y poner de manifiesto la importancia de conservar a un grupo taxonómico que se encuentra globalmente amenazado.