La tortuga “Della” –diminutivo de Granadella- ha podido regresar hoy al mar tras cinco meses ingresada en el “hospital” ARCA del Mar, del Oceanogràfic, donde se ha recuperado de las graves lesiones que presentaba cuando fue rescatada este verano en Xàbia.
Fue en agosto cuando un grupo de jóvenes que navegaba a dos millas del Cabo de la Nao la encontró enredada en plásticos e hilos de pescar. Avisaron a la Red de Varamientos a través del 112 y en colaboración con la Policía Local de Xàbia pudieron liberarla y trasladada al ARCA del Mar.
El quelonio ha sufrido la amputación de una de sus aletas anteriores, una secuela que en palabras de los expertos, no impide su retorno al mar con plenas oportunidades de supervivencia. La suelta de la tortuga ha sido esta mañana en la Granadella, como el primer acto del proyecto Xàbia 2017 que desarrolla la Fundación Oceanogràfic en el municipio y con el que se pretende dar valor a la biodiversidad marina en un programa de investigación y actividades divulgativas.
En este acto simbólico han participado los principales protagonistas del rescate, como Fernando, uno de los jóvenes que la encontró, y el agente José Juan Vallés, quien participó en su evacuación. También han estado el alcalde, José Chulvi, y las concejalas de Seguridad, Pepa Gisbert, y Medio Ambiente, Doris Courcelles y agentes del Seprona, además de decenas de niños y curiosos.
Según han explicado desde el Oceanogràfic, se ha elegido la Granadella como punto de suelta debido a su valor ambiental y porque representa un icono de la sostenibilidad y las buenas prácticas ambientales, iniciadas con el fin de preservar esta cala de la gran presión antrópica a la que ha sido sometida en los últimos años. Además, este emplazamiento tiene también una vertiente cultural con el medio que suponen las pesqueras y la ocupación de las cuevas de los acantilados.