La ausencia de público es una novedad para los animales del Oceanogràfic. Esta circunstancia es excepcional por el estado de alarma. Los cuidadores han decidido hacer modificaciones en el programa de enriquecimiento ambiental dando la posibilidad a algunos animales de conocer algunas zonas y otras especies del acuario.
La primera en experimentar esta novedad ha sido la desinhibida Mufasa. Se trata de una espátula rosada. El ave ha podido jugar e interactuar con uno de los animales más grandes y más simpáticos del acuario, la beluga Yulka. El ave, que tiene un curioso pico en forma de espátula, ha llamado la atención de la beluga que estaba dentro del acuario, esta se ha mostrado social y comunicativa.
El ave Mustafa ha sido preparada para formar parte del programa Animal Embassador. Una iniciativa con la que el Oceanogràfic acerca la realidad de las especies a sus visitantes.
Sin embargo, a Zazú le pareció muy excitante su gira turística. Zazú es un joven ibis escarlata que, normalmente, tiene mucho desparpajo con los visitantes de público y el túnel de los tiburones y rayas han despertado su curiosidad por estos compañeros de las profundidades.