El animal ingresó en el Oceanogràfic en noviembre de 2019 capturada por un trasmallo, con ingesta de plástico y un cordel de globo, un trozo de un pez espada y una grave fractura en el caparazón.
La Fundación Oceanogràfic ha soltado esta mañana, con motivo del Día Mundial de los Océanos, la tortuga que ingresó con el número 500 en el Área de Recuperación y Conservación de Fauna Marina, más conocida como ARCA del Mar, en la playa de El Saler.
Este animal ejemplifica de forma cruda las adversidades con las que se encuentran las tortugas marinas (Caretta caretta) en el Mediterráneo, principalmente debido a la acción humana, y prueba la capacidad de resistencia que tienen estos quelonios.
Ingresó en noviembre de 2019, gracias al aviso de un pesquero de Perelló-Cullera que lo capturó accidentalmente con un trasmallo, con una notable ingesta de plástico más un cordel de un globo de helio de unos 50 centímetros, con un trozo del apéndice del pez espada alojado en la zona dorsal y, para colmo, con una grave fractura en el caparazón, posiblemente ocasionado por la colisión con una embarcación.
Después de 7 meses en los que se han sucedido diversas intervenciones y cuidados veterinarios, la tortuga ha vuelto al mar con todas las garantías para su incorporación al medio natural, y con un microchip identificativo y una chapa del ministerio incorporados para que, en caso de volver a ser capturada, en cualquier parte del planeta puedan contactar con el Oceanogràfic.